Episodio No. 67
La legendaria espada resplandeciente. El espadachín misterioso, Shógo Amakusa.
Por: Ana Maria Trejos
Herrera
psiconani12@yahoo.com
- ¡Ya todo está listo! –exclamó Kaoru- ¡Kenshin!
- ¡Oh! Se ve muy bien… -dice Sanosuke-
- ¡Voy a comenzar! –gritó Yahiko-
- De prisa, porque sino… -dice Kaoru-
En ese instante Kaoru voltea para ver a Kenshin y se sorprende al ver su expresión.
- ¿Una carta? –dicen todos-
- La enviaron de Kyoto –dice Kenshin-
- ¡Oh! No puedo creerlo, Misao acaba de enviar una carta –dice Sanosuke sorprendido-
- Ya habíamos recibido una –expresa Yahiko-
- Pero la de hoy es diferente –dice Kenshin con expresión sombría- parece que hubo algún extraño incidente en Kyoto.
- ¿Incidente? –pregunta Yahiko-
Kenshin empieza a leer la carta:
“El cadáver estaba flotando en un río, de inmediato descubrimos de quien se trataba, era un hombre muy importante que trabajaba para el Shogunado. ¿Por qué un hombre saludable, perteneciente a una familia famosa terminaría de esa forma? Es algo aterrador, en su cuerpo dibujaron toda clase de figuras y patrones, todos son muy extraños, pero el más extraño se encontraba en su espalda, debe tener algún significado, estoy segura, ya lo están averiguando. Nadie sabe quien lo hizo ni cual es el motivo. El caso es un misterio y es de lo único que se habla en Kyoto”
Mientras tanto en Kyoto, en la casa de Aoshi Shinomori…
- ¡Por favor, te lo ruego, te pagaré lo que pidas! Aoshi, ayúdame con tus habilidades, después de todo fuiste un miembro de los Oniwawanshu; una fuente de alta fidelidad me dijo que eres el más apto y capacitado en Kyoto. Solo tú puedes salvarme, ¡Por favor ayúdame!
- Cuantas veces tengo que repetirte que él no desea volver a luchar en este momento –grita Misao desde el otro lado de la habitación- Aun si dios se lo pide de rodillas, no lo hará.
- Recibí una nota con una amenaza que decía: “Sabes mucho sobre el cuerpo en el río, el próximo en iniciar su viaje al infierno serán tú” Aquí está.
- ¡Oh! ¿pero quien te pudo enviar semejante mensaje? –pregunta Misao-
- No puedo confiar en la policía ¡Señor Aoshi, por favor ayúdeme!
- No importa cual sea la razón, pero no tengo la más mínima intención de volver a usar mi espada. Por favor vuelva a casa –exclama Aoshi colocándose en pie-
El hombre se marcha angustiado y Misao se dirige a donde Okina…
- Anciano ¿De que crees que se trate esto? –pregunta Misao enseñándole la carta a su abuelo-
- Creo que se trata de un idioma extranjero.
- ¿Idioma extranjero?
- Es el mismo que apareció en el cuerpo que encontramos en el río; pero podría estar escrito en Holandés o Portugués.
- Anciano, ¿Eso quiere decir que el asesino es un extranjero?
- No estoy seguro.
- Puedo sentir que este será el inicio de un acontecimiento de gran importancia.
Misao no podía estar más en lo cierto…
Más tarde, en la habitación donde Aoshi medita todos los días…
- ¿Se encuentra Misao aquí? –pregunta Okina a Aoshi- tengo información.
- Okina… -exclama Aoshi-
- Aoshi, quiero saber que es lo que está sucediendo, ¡No me digas que Misao no está aquí!
- Dime que fue lo que investigaste.
- “Han pasado 250 largos años, el tiempo de la venganza ha llegado, primero fue el río, después la luna llena; dios llegará cuando el día muera y solo quede una gran oscuridad” Esta símbolo fue usado por los cristianos en el principio de la Era Hedo, pero fue prohibido y ya hacía mucho tiempo que no se veía por alguna parte –dice Okina-
Aoshi corre y piensa… “Misao, no cometas una tontería”
Mientras tanto, en la casa del hombre que había recibido la amenaza…
- Si deseas salir hazlo –dice Misa- déjate ver para saber quien eres; si hay algo que yo pueda…
En la casa se encontraban muchos hombres custodiando, jugando cartas, otros con metralletas. El hombre que había recibido el aviso se encontraba muy angustiado, tomaba vino y sudaba de terror, de pronto, abre los ojos en una expresión fría de horror y su boca se tuerce en una mueca de pánico y grita: ¡Por favor, protéjanme! Se oyen disparos afuera, una espada esta golpeándolo todo… Misao corre y nota que el sujeto ya ha entrado a la casa, ahora, todos los hombres están en el suelo, muertos o inconscientes. Pero lo que si es seguro, es que han matado a aquel angustiado hombre.
Misao se encuentra frente a frente con el espadachín. Aoshi esta llegando en ese preciso momento, pero ya es tarde, el espadachín salta al tejado, aún continua observando a Misao, y Misao continua mirándolo a él, quien en fracciones de segundo, lanza un rayo de luz sobre Misao. Los ojos de Misao se tornan blancos y cae al suelo.
Aoshi la toma en sus brazos mientras mira con sus antiguos ojos de asesino hacia el tejado y logra divisar en el cuello del espadachín el collar que tiene el símbolo de los cristianos.
Luego, en el Dojo Camilla…
- ¡Señor Shiroko! –dice Kaoru sorprendida-
- Deseo ver al señor Kenshin, ¡Es muy urgente! –grita el miembro activo de los Oniwawanshu-
- Si.
Cuando Kenshin sale a su encuentro…
- ¿Ir a Kyoto? –pregunta Kenshin sorprendido-
- Aoshi me dijo que usted debería ir tan pronto como pudiera; yo lo acompañare, por favor…
- ¿Ir a Kyoto? –vuelve a preguntarse Kenshin meditabundo-
Mientras tanto en otro lugar de Kyoto…
- Ya veo, así que usted recibió el tercer aviso esta mañana o, ¿estoy equivocado? –dice Sho, o como algunos de nosotros lo conocen “cabeza de escoba”-
- Así es señor –dice el hombre preocupado-
- ¿Por qué lo quieren muerto? ¿Tiene alguna idea de quien quiere matarlo?
- No, ninguna.
- ¡Vamos! ¡Hábleme! ¡Tengo muy poca paciencia! –grita Sho- ¡Dígame quien lo quiere muerto, dígame de una vez y me ocuparé de él! ¡¿Oye lo que digo?!
- Mire, este libro esta escrito por un ministro portugués –dice el hombre enseñándole el libro a Sho-
- ¡Oh! Está escrito en lengua extranjera y no puedo entenderlo.
- “La tercera venganza se llevará a cabo cuando llegue la noche, en ese momento aparecerá un hijo de dios”
Kenshin, Kaoru, Yahiko y Sanosuke se dirigen a Kyoto. Ya en la casa de Misao…
- Acabo de ver a Misao y no se ve muy bien –dice Kenshin a Okina-
- Ella está bastante débil, espero que se recupere muy pronto porque no recibió herida alguna ni nada parecido –dice Okina-
- Entonces, ¿Ella esta bien? –pregunta Yahiko-
- El corazón de Misao fue golpeado por la luz Kenshin –dice Aoshi- la luz de su espada penetró en el corazón de Misao esa horrible noche. Era una luz tan potente, nunca antes había visto algo similar…
- ¡Shinoido! –dice Kenshin- nunca antes había visto un truco similar a ese.
- ¿Shinoido? –pregunta Kaoru-
- Golpea al oponente con la energía de la espada para detener todos sus movimientos –dice Aoshi-
- Esa noche –afirma Okina- el único que murió en la mansión fue un hombre llamado Casai, que había recibido el tercer aviso, las otras personas que estaban allí perdieron la conciencia y cayeron al suelo sin sufrir herida corporal alguna igual que Misao; asumo que recibieron algún impacto de alta velocidad… debió ser eso…
- ¿Qué quieres decir? –pregunta Yahiko-
- Esa es una de las razones por la cual te llamé –dice Aoshi a Kenshin- puedo asegurar con certeza que su estilo de espada es el…
- ¿Te refieres al Hiten Mitsurugi?
- Si.
- ¡Que! ¿Cómo? Pero eso es imposible –grita Sanosuke poniéndose en pie- ¿el estilo Hiten Mitsurugi? ¡Nunca! ¡De ninguna forma!
- El movimiento de su espada es sin duda el movimiento de la velocidad de dios –afirma Aoshi-
- ¡Suficiente! –grita Sanosuke- ¡No quiero seguir escuchando estas tonterías!
- Y eso no es todo… es de un nivel como el tuyo o mejor… -dice Aoshi-
- ¿Qué? ¿Qué estás diciendo? –pregunta Yahiko sorprendido-
- ¿Mejor que Kenshin? –pregunta Kaoru-
Yahiko empieza a reír.
- No puede ser verdad –dice Yahiko- ¡No puedo creerlo! A menos que sea el mismísimo dios o algo mas…
- Yo creo que debe ser lo que tu dices Yahiko –dice Aoshi-
- ¿Un dios? –pregunta Kenshin-
- ¡No, no puedo creer que tal sujeto pueda existir! –dice Sanosuke- Solo creo en lo que creo y ese es Kenshin…
Después de sostener esta discusión Kenshin se dirige a donde su maestro Seijuro Hiko…
- ¡Que falta de modales tienes! Vienes hasta aquí, trayendo problemas y nisiquiera traes un presente –dice Seijuro enojado-
- ¿Un presente? –pregunta Kenshin anonadado-
- Es costumbre traer una botella de Saque o algo parecido ¡Aprende buenos modales!
- ¡No esperes que actué de esa forma! –dice Kenshin-
- En este momento no espero nada más.
- ¡Entonces no tienes porque quejarte! –grita Kenshin-
- Sabía que tendrías que llegar, estos asesinatos, misteriosos y con alguien utilizando la técnica del estilo Hiten Mitsurugi. No podía pasar desapercibido todo esto, debes actuar, estoy seguro que por fin ha llegado la hora.
- Maestro, tratas de…
- Quiero que sepas que su nombre es Shogo Amakusa.
- ¿Shogo Amakusa?
- Es un espadachín cristiano a quien la gente ha llamado el segundo Shiro Amakusa.
Mientras tanto, en la casa del tercer amenazado…
- ¿Cuando será que va a llegar? ¿Qué querrá decir eso de que cuando el día muera y solo quede una gran oscuridad? –se pregunta el amenazado-
- ¿El hijo de dios? ¿La predicción? ¡de que está hablando! ¡lo único que logra es confundir a la gente! ¡El hombre más poderoso del mundo soy yo! –dice Sho-
Continúa la conversación de Seijuro y Kenshin…
- La historia se remonta hace 40 años, la época en que mi predecesor, en otras palabras, Seijuro Hiko duodécimo, estaba activo. Un pupilo de quien se esperaba se convirtiera en Seijuro Hiko decimotercero… Hioe… pero no pudo pasar el último entrenamiento para tener éxito en el estilo Hiten Mitsurugi y por ende, así terminó su carrera. Se supone que el pupilo tiene que derrotar el Cutsurio Sen usando el Amakakero Ryo-no Hirameki, sino lo logra, lo único que le espera es la muerte. Hioe, después de perder cayó en la catarata y murió. Pero después de 10 años oímos el rumor de que estaba vivo en China.
- Pero… -interrumpe Kenshin-
- Incluso se supone que Hioe debe tener un poco mas de 70 años; y eso no es todo, también nos enteramos que es un cristiano y ahora anda en la absoluta clandestinidad.
- ¿Un cristiano en la clandestinidad? –pregunta Kenshin-
- Si, y ese pueblo en China debe ser un lugar maravilloso para los cristianos japoneses, para practicar libremente su religión; entonces 10 años más tarde regreso al Japón. El usaba el estilo Hiten Mitsurugi y lo acompañaba un chico, al cual, educó para que se convirtiera en un líder para aquellos cristianos japoneses que fueran maltratados. Y domino la técnica de la súper velocidad de dios a los 14 años y venció el Cutsurio Sen de Hioe. Hioe no esta calificado para usar el estilo Hiten Mitsurugi, pero esta claro que si su Cutsurio Sen fue derrotado tiene que llamarse Amakakero Ryo-no Hirameki. Se dice que realizó toda clase de milagros, Hioe le dio una legendaria espada, la que pertenecía a Shiro Amakusa. No se que pueda estar planeando ahora, nisiquiera se si es un humano o un hijo de dios. Deber tener mucho cuidado si te enfrentas a él, no puedes perderlo de vista ni un solo instante. Buena suerte, se llama Shogo Amakusa.
“La hora de la venganza ha llegado, el hijo de dios llegará cuando el día muera y solo quede una gran oscuridad”
El sol empieza a ponerse lentamente… el día se está convirtiendo en oscuridad…
- ¡Oh! Este es… -dice Seijuro-
- El momento en que muere el día –dice Kenshin-
- No, de ninguna manera –dice Sho colocándose en posición de defensa frente a la casa del tercer amenazado-
El día cae. Shogo Amakusa ha aparecido… en el sol se dibuja el símbolo de la cristiandad…